El 5 de octubre de 2022 Netflix estrenó la película italiana Sin miedo a las estrellas. Se trata de una adaptación de la novela de Chiara Parenti, que nos llevará a conocer a Sole (Federica Torchetti), una joven que está a punto de cumplir 25 años y a la que su ansiedad no le permite llevar una vida normal.
Una carta escrita para ella por su mejor amiga Emma dirigida a ella antes de morir en un accidente, hará que la joven se planteé cambiar su vida. Sole ve en ella una motivación para cumplir las últimas voluntades de su mejor amiga que le pide hacer una lista de todas aquellas cosas que siempre quiso hacer pero que nunca se atrevió.
Os dejo el tráiler en italiano; no he podido encontrar otro. Y esto creo que ya es suficiente para hacernos una idea del tipo de película que es Sin miedo a las estrellas.
Sin miedo a las estrellas. Una comedia romántica facilona.
Sole es una joven con ilusiones y sueños a los que ha tenido que dejar de lado debido a su ansiedad; una enfermedad a la que hasta hace pocos años no se le había dado importancia. La joven es incapaz de llevar una vida normal y de hacer las cosas que el resto de jóvenes de su edad hace debido a su miedo a ser juzgada; a intentar algo y fracasar.
Su única amiga, Emma, era su mundo. Pero todo eso cambió cuando ella ‘la abandonó‘ y se fue a vivir a Paris con su novio. Sole nunca superó que ella se marchara, y todo fue a peor cuando Emma falleció en un accidente de tráfico. Desde ese momento la vida de Sole empezó a ir en caída libre.
Sole dejó los estudios y se dedicó a vivir en el pequeño pueblo en el que nació mientras los años pasaban. Pero su vida dio un giro total cuando Massimo (Lorenzo Richelmy) el hermano de Emma, regresa de Milán dándole una carta de su hermana para Sole.
En ese momento toda la vida de Sole empieza a ponerse patas arriba. En la carta, su amiga la invitaba a ayudarla a cumplir una lista de cosas que le gustaría hacer pero que nunca se había atrevido a hacer; unas últimas voluntades de su mejor amiga que ella sabe que no va a cumplir.
Al duro golpe de recibir la carta se une el volver a ver a Massimo del que siempre estuvo enamorada sin ser correspondida. Un torrente de sentimientos la inunda, por un lado vuelve a sentir ese cosquilleo de ilusión por ver al joven y al mismo tiempo está enfadada con él por no haberle dado la carta cuando Emma la escribió.
En medio de ese revuelo de emociones conocerá a dos jóvenes que conseguirán centrarla en sus objetivos. Miriam una joven atrevida y resuelta que le ofrece ayuda para cumplir la lista de Emma. Gracias a ella, Sole empezará a ver que la vida no es tan gris como ella siempre la había visto. Y Danio, un joven abierto que ofrecerá a Sole la posibilidad de empezar las cosas que siempre había querido hacer.
En SinSpoiler.
Película de fin de semana.
Sin miedo a las estrellas es una película facilona, su trama es ligera y muy fácil de seguir. Es una historia de superación de color de rosa. Una forma diferente de enfrentarse a una enfermedad a la que la película no le da ninguna atención, ya que en ningún momento se profundiza en ella. Solo hay un momento en Sin miedo a las estrellas en que vemos lo trágico de padecerla, pero el resto de la misma se convertirá en algo casi anecdótico.
Han preferido darle más importancia a ese lado positivo que nos deja como mensaje Sin miedo a las estrellas. Y es que la mayor fuerza que tiene una persona es la voluntad para cambiar las cosas que no le gustan. Superar los miedos de Sole es la base de toda la historia y sobre ella se van desarrollando el resto de pequeñas cosas que hacen que la vida sea diferente.
Cada vez que la joven consigue hacer una de las cosas de la lista su autoestima y confianza sube, y eso la anima a continuar con ella hasta terminarla. Por supuesto, esto no lo habría conseguido ella sola. Desde el principio dice una y otra vez que no lo va a hacer, y si se atreve a intentarlo es gracias al apoyo de Miriam y Danio.
Así que podemos decir que Sin miedo a las estrellas es una historia de superación y amistad desde un punto de vista positivo. Pero ese tiene un peligro, ya que es muy fácil caer en lo superficial. Y eso es exactamente lo que sucede con Sin miedo a las estrellas. Se queda en una historia con momentos divertidos, que podrían haber sido algo más, pero que no llenan al espectador. La típica película de fin de semana.
