El pasado viernes 24 de septiembre Netflix estrenó Misa de medianoche. Una serie de terror muy particular que viene de la mano de Mike Flanagan, y promete ser una de las mejores series de este año en su recta final. La serie tiene un total de siete episodios, cada uno de ellos titulado como uno de los libros que componen la Biblia, lo que nos indica que esta vez el director tratará el tema religioso.
La serie nos lleva hasta una pequeña isla situada a cincuenta kilómetros de la península. Una isla básicamente pesquera donde sus vecinos se conocen bien y donde la mayoría de ellos llevan una vida apacible y tranquila, muy rutinaria. Todo esto se romperá con la llegada a la isla de un nuevo sacerdote que les mostrará lo que él cree que es el verdadero camino a seguir.
Mike Flanagan y su particular visión del terror.
Para saber mejor qué te vas a encontrar en Misa de medianoche es necesario que conozcas un poco sobre la trayectoria de Mike Flanagan. Nacido en Salem en 1978 estudió Cine y Medios Electrónicos y nada más concluir sus estudios empezó a participar en proyectos como ayudante. Fue en 2005 cuando el director se introdujo por primera vez en el género del terror con Oculus, una aplaudido cortometraje que supone el principio de una ambiciosa antología de terror, y que sería la inspiración para el largometraje del año 2015 del mismo nombre
Fue en 2010 cuando el director recibió el reconocimiento que buscaba con Absentia, una película de terror independiente que fue muy bien recibida por la crítica, y que fue rodada en el apartamento del propio Flanagan. En 2016 llegaría Hush, una serie producida por Netflix, lo que supuso el reconocimiento del público; Somnia: dentro de tus sueños y Ouija: el origen del mal. A estas le siguió en 2017 la adaptación de la novela de Stephen King, El juego de Gerald. Posteriormente llegarían La maldición de Hill House en 2018; el largometraje Doctor Sueño del año 2019; y la serie La maldición de Bly Manor en 2020.
Misa de medianoche nos mete de lleno en la particular visión del terror de Mike Flanagan. Una pequeña isla cuyo único recurso es la pesca será el escaparate donde se desarrolla esta serie. Una comunidad cerrada donde la llegada de un nuevo sacerdote va a suponer un cambio radical en la monótona vida de todos sus habitantes.

El director está casado por segunda vez, con la actriz Kate Siegel. Ella ha aparecido en la gran mayoría de sus películas y series (Hush, Ouija: el origen del mal, El juego de Gerald, La maldición de Hill House, La maldición de Bly Manor). Concretamente en Misa de Medianoche dará vida a Erin Greene, una mujer cuya vida está muy unida a la de Riley Flinn, y que sufrirá una de las consecuencias de los milagros de forma no esperada.
Kate Siegel (La mujer del viajero del tiempo) no es la única asidua en sus producciones, Flanagan suele recurrir a los mismos actores para protagonizar los personajes de sus series o películas. Suponemos que esto se debe al estrecho lazo que los une con ellos, que hace mucho más fácil la comunicación entre director y actor. Un ejemplo de esta recurrencia son los actores Henry Thomas, Sheriff Hassan o Alex Essoe. Como curiosidad, el propio director aparece en una de las escenas de la serie haciendo un brevísimo cameo.
Misa de medianoche: un must see.
Si buscas el típico terror de sustos y sangre, en Misa de medianoche no lo vas a encontrar. Estamos ante un terror diferente, de esos que te hacen pensar y mucho sobre la naturaleza tan pintoresca que determinadas personas tienen. La serie está llena de diálogos extensos donde sus personajes sacan a relucir temas como la muerte por ejemplo, y del que hablan con total naturalidad contándonos sus pensamientos más profundos.
Misa de Medianoche explora esa parte del ser humano que es capaz de dar el sentido que uno quiere sobre unos hechos que nada tiene que ver con él. Una comunidad pequeña cuyo número de habitantes cada vez es más reducido debido a las pocas alternativas para ganarse la vida que la isla tiene. Esa comunidad aislada por mar del resto del mundo donde un hecho sobrenatural es tomado como lo que no es.

Es fascinante ir viendo como los habitantes de ese pequeño pueblo van creando la historia que ellos quieren. Sobre todo su sacerdote el padre Paul (Hamish Linklater) personaje que cree haber sido elegido para mostrar una serie de milagros a su comunidad. Otro personaje en el que podemos ver esa ceguera de la realidad es la ayudante del sacerdote, la devota obsesiva Bev Keane, cuyo papel está interpretado por Samantha Sloyan de forma magistral, creando en el espectador una especie de odio hacia ella.
Por otro lado tenemos a Riley Flinn (Zach Gilford), un joven que abandonó la isla hace unos años y al que un accidente provocado por su embriaguez le llevó a la cárcel por homicidio involuntario. Riley regresa a la isla después de haber cumplido su condena para reencontrarse con su familia y el resto de habitantes de la pequeña comunidad. El joven sufre su particular tortura por no haberse perdonado el haber arrebatado una vida por su imprudencia.
Otra parte fascinante que nos muestra Flanagan en Misa de Medianoche es la capacidad que tiene el ser humano de convertirse en un rebaño (nunca mejor dicho). La gran mayoría de habitantes de la pequeña isla nunca habían pisado la iglesia, o no en mucho tiempo, pero al empezar ‘los milagros’ todos ellos corren a sus puertas convertidos en los creyentes más fieles que puedas encontrar. Todos ellos con la egoísta idea de no quedarse atrás y de poder ser participes de esos milagros que están sucediendo justo delante de sus ojos.
En resumen.
Estamos ante una obra intensa, donde la acción no existe y todo va surgiendo de manera tranquila. De un hecho nos lleva a otro pausadamente, mientras sus personajes nos muestran sus sentimientos con diálogos a los que hay que prestar atención, ya que poco a poco te llevarán a entender la situación en la que la pequeña isla va a caer irremediablemente, como si de una maldición se tratara.
No es una serie para hacer un maratón, hay que dejar que ‘respire’. Su intensidad es tal que es mejor dejar pasar el tiempo entre un episodio y otro para pararse a pensar y también para aprovechar y atar cabos.
Misa de medianoche es una serie calmada llena de un terror psicológico muy peculiar, donde su sorpresa es ir descubriendo poco a poco hasta donde puede llegar el fanatismo. Una joya que Mike Flanagan nos deja antes de continuar con su siguiente trabajo: El club de medianoche, de la que pronto tendremos noticias.