Mi otra yo se estrenó en Netflix en julio sin hacer mucho ruido. La serie turca parecía que iba a ser una serie más de todas las que forman el inmenso catálogo de la plataforma de streaming más popular. Pero, nuevamente el boca a boca, ha hecho que esta producción se cuele en el top ten de lo más visto y que sean muchos los que estén hablando de ella para bien.
Mi otra yo nos lleva a conocer a tres amigas durante un momento que les cambiará la vida, cuando una de ellas, enferma desde hace tiempo, decida probar otras alternativas a la medicina clásica. Para ello se desplazará a una de las ciudades turísticas más bonitas de Turquía (Ayvalik), y sus dos amigas la acompañarán.
Mi otra yo: Magia, romance y drama.
Primero tengo que decir algo sobre Mi otra yo. Y es que es una de esas series que odias o amas; no hay término medio. Se trata de un drama con una gran dosis de romance que utiliza la magia para crear una trama sobre como la vida puede cambiar cuando le damos otro enfoque.
Todo ello está aderezado con un toque alegre que consiguen que la serie sea parecida a una comedia romántica. Aunque también tiene momentos tristes. Estos están colocados de forma estratégica para que la historia funcione como debe.
Como ya vimos en otra serie turca, Medianoche en el Pera Hotel, se sirven de un toque de magia para crear una historia dramática con desenfado; donde nuestras protagonistas van a descubrir que existe otra forma de ver sus vidas.
Pero los cambios no son fáciles, y esto les llevará a experimentar una serie de hechos donde todo lo que han construido hasta ahora empieza a derrumbarse, para dejar paso a esta nueva manera de afrontar la vida que es totalmente diferente a todo lo que habían tenido hasta ahora.

Teniendo en cuenta que se trata de una ficción, la serie nos muestra que existen otros caminos a la medicina tradicional. Mediante sesiones espirituales, las tres mujeres conectarán con sus antepasados para descubrir que trágico suceso ocurrió y cuya carga llevan ahora ellas.
Según Mi otra yo, esa carga es la culpable de todos los traumas (y enfermedades) que las tres amigas tienen en sus vidas actualmente. Un recorrido esotérico que les llevará a aceptar su pasado, entenderlo y conciliarse con él, para así poder empezar a cambiar las cosas que no están bien en sus vidas.
Mi otra yo consta de 8 episodios de aproximadamente una hora cada uno, y no está basada en hechos reales. Se trata de una ficción creada por Nuran Evrin Sit y dirigida por Burcun Alptekin.
Las tres protagonistas.
Una de las cosas que hace funcionar a la serie turca son sus protagonistas. Tres amigas que desde que se conocieron en la universidad son inseparables. En esto la serie apuesta por el valor de la amistad incondicional, donde si una de ellas tiene un problema las otras dos estarán siempre ahí para apoyarla. Y también nos mostrará que las discusiones forma parte de la vida y que lo importante es saber dejarlas de lado.
Ada (Tuva Büyüküstün) es una doctora casada y sin hijos, cuya vida está centrada en su trabajo. Su máximo sueño es conseguir una carrera profesional llena de éxitos y reconocimientos. Esto choca con la idea de su marido de tener hijos.
Este deseo tan fuerte de Ada va creando una brecha en su vida matrimonial que ella no ha visto y que se hará patente al reencontrarse con alguien de su pasado que fue muy importante en su vida.
La joven, como buena científica, no cree en nada que no tenga una base y un razonamiento. Por lo que será la más escéptica a la hora de entender esos viajes astrales que las transporta a las vidas de sus antepasados.

Leyla (Seda Bakan) es una mujer adinerada casada y con un hijo, que vive rodeada de lujos. Todo parece indicar que es la más afortunada de las tres amigas ya que posee dinero suficiente para vivir una vida a todo tren.
Pero pronto veremos que nada es lo que parece, y detrás de ese matrimonio hay más de lo que a primera vista se aprecia. Desvelando que Leyla es una mujer insegura y que no es tan feliz como dice serlo. Ella tendrá que enfrentarse a sus miedos para poder tomar las riendas de su vida.
Sevgi (Boncuk Yilmaz) es una abogada soltera y sin pareja que se enfrenta a la peor lucha de su vida: superar un cáncer. El tratamiento al que está siendo sometida no está funcionando, así que decide buscar alternativas.
En resumen
Mi otra yo, es una serie de ficción turca que no está basada en hechos reales. Es una historia que mezcla la magia con el drama, convirtiéndola en una especie de comedia romántica. Una trama ligera que tiene como pretexto la magia para hablarnos de una forma diferente de ver nuestras vidas.
Podríamos decir que es una serie ideal para el verano, donde buscamos historias amenas con un toque de esperanza y positividad, que nos hagan pasar un rato entretenido. Aunque, como dije antes, no es para todos los gustos, ya que muchos han encontrado un poco cínica la forma de sustituir la medicina tradicional por los viajes astrales.
Todavía no se ha dicho nada sobre una segunda temporada, cosa que bastante probable si tenemos en cuenta como termina esta primera tanda de episodios. Tendremos que esperar a que Netflix se pronuncie sobre esto.