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El espíritu de Bridge Hollow (2022) Terror familiar.

Netflix calienta motores para Halloween con el estreno de El espíritu de Bridge Hollow, una película para ver en familia y pasar un rato escalofriante. Todo ello enfocado para que los más pequeños empiecen a buscar su disfraz y se preparen para esta fiesta importada que cada vez tiene más protagonismo.

La película está dirigida por Jeff Wadlow, un experto en mantener a los más mayores entretenidos (Kick Ass 2, Bate Motel), y que esta vez ha decidido atreverse con una películas destinada a otro público. El creador de la historia es John R. Morey, creador y productor de la serie de animación para adultos Padre de familia.

Los protagonistas de El espíritu de Bridge Hollow son una familia recién mudada a un pueblecito donde se toman las tradiciones muy en serio y donde todos sus habitantes participan activamente en ellas. Pocas horas antes de Halloween, el pequeño pueblo tendrá que luchar contra una maldición que ha vuelto del pasado para hacerse realidad.

El espíritu de Bridge Hollow. Un tráiler que lo cuenta todo.

Si has visto el tráiler de El espíritu de Bridge Hollow te puedo decir que casi casi has visto toda la película. Vale, te faltaría ver el final, pero entre tú y yo, ya lo sabes. La película está destinada a un público juvenil y sabemos como tiene que acabar antes de que empiece.

Sydney (Priah Ferguson), la hermana empollona de Stranger Things, es una joven que ha tenido que abandonar a sus amigos y su vida en Brooklyn para mudarse junto a su familia a un pequeño y tranquilo pueblo llamado Bridge Hollow.

Su padre, interpretado por Marlon Wayans, es un profesor de ciencias que siempre ha controlado a su hija en todo, incluso en las actividades extraescolares a las que se apuntaba. Esta sobre protección unida a su mente cientiífica hace que no crea en Halloween, y por ese motivo nunca lo celebran.

El espíritu de Bridge Hollow

Por eso su sorpresa al llegar a Bridge Hollow y encontrarse con que todos los vecinos tienen sus casas decoradas con motivos de esa celebración. Y no se trata de unas cuantas telarañas y calabazas, no no. El pueblo se vuelva entero en esta celebración con decoraciones muy elaboradas.

A pesar de todo el ambiente que se respira en las calles, Sydney no podrá convencer a su padre de decorar la casa y disfrazarse para participar en la celebración de ese día tan especial para el pueblo, ya que coincide con una celebración suya, la de la leyenda del malvado Jack el tacaño. Y por casualidades de la vida, este ser malísimo murió en la casa que la joven y sus padres viven ahora.

Por un descuido y también por desconocimiento, Sydney y su padre liberarán a Jack de su cautiverio, convirtiendo la pequeña y tranquila población en un lugar donde los objetos decorativos de Halloween han cobrado vida y campan a sus anchas. Padre e hija deberán unir fuerzas y confiar el uno en el otro para intentar devolver a la normalidad todo, y también para acabar de una vez por todas con el terrible Jack.

Una película con moraleja.

Ya lo has visto, El espíritu de Bridge Hollow cuenta con un argumento muy tópico en todos los sentidos. Tenemos a varios vecinos bastante peculiares, incluida la alcaldesa del pueblo Tammy (Lauren Lapkus); tenemos a un grupo de amigos formado por tres jóvenes amantes de lo paranormal; tenemos brujería y un malo que vuelve por Halloween. Ah y una familia donde padre e hija no están pasando por sus mejores momentos.

Todo está destinado para un público muy concreto, para darles un rato de diversión que puedan compartir con la familia. Por ese motivo el terror está adaptado a estas edades y mezclado con escenas donde predomina el humor.

Todo para hacer que los más pequeños puedan dormir por las noches. Lo que si vamos a tener es algún que otro susto fácil (reconozco que di saltos en un par de ellos) sobre todo al inicio de El espíritu de Bridge Hollow, pero todo ello siguiendo con su sentido del humor destinado a los más pequeños.

El espíritu de Bridge Hollow

Por supuesto, El espíritu de Bridge Hollow tiene moraleja, como debe de ser. Esta vez va destinada hacia los padres que no admiten que sus hijos crecen y no necesitan que los cuiden tanto. Los niños se hacen mayores y tienen que empezar a volar solos, y eso significa tomar sus propias decisiones y equivocarse. Y para eso están los padres, para apoyarlos cuando las cosas no vayan tan bien como deberían y animarles a mejorar.