El abismo del infierno es una película polaca del año 2022 producida por Netflix estrenada el 27 de octubre del 2022 en la plataforma de streaming. Una historia perteneciente al género del terror, donde parece que últimamente cabe todo, y que no da todo el miedo que debería.
Más bien se trata de una trama misteriosa donde nos llevarán a un alejado y siniestro monasterio al que es muy difícil entrar y más complicado aun es salir de allí. Este lugar está habitado con un número pequeño de monjes que tienen la labor de sacar al demonio de los cuerpos, lo que toda la vida se ha conocido como un exorcismo.
Os dejo por aquí un pequeño clip de Youtube de El abismo del Infierno, que he hecho porque por más que he buscado no he encontrado el tráiler en condiciones aceptables.

SinSpoiler.
El abismo del infierno. Intriga y poco terror.
La película dirigida por Bartosz M. Kowalski, que también ha participado en el guion junto a Mirella Zaradkiewicz nos lleva en su inicio al año 1957 donde presenciamos un hecho perturbador que tiene como protagonista a un sacerdote.
Esto, junto con el título de la película, nos da una idea de lo que vamos a ver en El abismo del infierno, que queda totalmente aclarado en las siguientes escenas donde retrocederemos al año 1987 mientras acompañamos a un joven sacerdote llegando a un lugar inhóspito y oscuro donde se encuentra un monasterio viejo y sucio, aislado del resto del mundo.
La intriga por saber quien es este hombre, Marek (Piotr Zurawski), y que hace allí exactamente es lo que va a mantener la película hasta su mitad. Mientras tanto va mezclando ese suspense con escenas desconcertantes que no llegan a dar miedo al espectador, aunque alguna de ellas pueden resultar asquerosas sin ser sangrientas, si eres escrupuloso.

Por el contrario, esos monjes con sus estrictas normas y su forma de actuar, crea una atmósfera de tensión donde el Prior Andrejz (Olaf Lubaszenko) junto a sus inseparables monjes nos deja con una sensación inquietante y de malestar. Nos damos cuenta pronto, de que allí sucede algo, y que ese algo no es bueno y además es espeluznante. Pero no tenemos claro si esa maldad proviene de un ser oscuro y tenebroso o de manos más humanas.
La oscuridad en que se ha rodado El abismo del infierno contribuye a aumentar ese clímax tenebroso e inquietante, pero algunas escenas son demasiado oscuras y se nota que la calidad de la cinta no es buena. Llegamos a ver todo lo que sucede pero nos da la sensación de que estemos viendo una de esas películas de hace años, muchos años.
Para ver de fondo.
Llegado a este punto, viene una pregunta que nunca es fácil de responder: ¿recomendaría ver El abismo del infierno? Pues así de primeras diría que no, pero un no con matices. Es una película muy floja. Tiene un inicio parecido a otras que hemos visto ya, y lo único que la mantiene es una intriga que va decayendo a pasos agigantados.
He de decir que he visto otras mucho peores. La carga dramática funciona bien, y es fácil tener sentimientos, buenos o malos, hacia esos personajes perturbados que nos muestran en El abismo del infierno. Y si una película de estas características es capaz de eso, ya es decir mucho.

Si buscas terror de ese que tienes que taparte los ojos con las manos, no la veas. Pero si te gustan esas películas donde unos religiosos se convierten en una secta con secretos, donde no hay miedo sino intriga y algo de tensión, quizás (he dicho quizás) El abismo del infierno te haga pasar un rato entretenido.
Eso sí, si decides darle al play, no tengas las expectativas muy altas. La película es lo que es, y ni te va a quitar el sueño ni te va a dejar pensando en ella. Claro que siempre tienes la opción de quitarla y pasar a otra cosa si no te convence. Será por variedad…